Durante algunos días estamos viendo fotos y vídeos del chupinazo de San Fermín y de otras fiestas, tanto de este año y como años anteriores.
Estas imágenes y lo que en ellas sucede es
desagradable, repugnante, denunciable, agresivo, violento,…y aun con todos
estos calificativos no podemos describir lo que sentimos a ver que estas
conductas aun sucedan. Y para los hombres que se lanzan y se creen con el
derecho de manosear y desnudar a una mujer, ni si quiera se nos ocurre que
calificativo podríamos utilizar que los describa.
Y no solo nos cabrea los hechos en sí, a ello hay
que añadir los comentarios y las opiniones que sobre ellos se realizan.
Porque claro hay personas que consideran que si
una chica se sube a hombros de un chico y se quita la camisa, está provocando y
pidiendo a gritos que la toquen y la ayuden a terminar de desnudarse. La realidad
y lo que tenemos que empezar a meternos en la cabeza es que nuestro cuerpo es nuestro y hacemos con él lo
que queramos, y el quitarnos una camiseta, ir en bikini o ponernos una falda no
lo hacemos para provocar a nadie, ni estamos dando permiso a nadie para
agredirnos sexualmente.
Otras personas consideran que quienes se meten en
la plaza en el chupinazo de San Fermín o de otras fiestas, se está arriesgando
a que la desnuden y la agreden, porque es lo que hay y lo que pasa. Vuelve a
ser curioso el análisis que hacemos de las agresiones sexuales, pues criticamos
a las mujeres que van a la plaza en vez de criticar que existan hombres que se
crean en el derecho de agredir. Deberíamos empezar a plantearnos como seguimos buscando
y utilizando argumentos para justificar agresiones sexuales, en vez de dedicar
tiempo a educar en el respeto hacia los demás, en este caso que nuestros niños
y adolescentes aprendan sobre el respeto a la libertad de las mujeres para
elegir quienes las desnudan y las tocan, en vez de seguir enviando el mensaje
de la culpa la tiene ellas por estar de fiesta e ir provocando.
Por otro lado, otras de las frases típicas, es
que a ellas se las ve con cara de disfrutar. No tengo nada claro y no me creo
que haya ningún disfrute por su parte, pero claro tenemos que utilizar algún argumento
para que nuestra conciencia se quede más tranquila al ver lo que está pasando y
que no se haga nada para pararlo.
Os dejamos varias notas de prensa e imágenes de
lo sucedido.
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